Sobre Mi
Yo soy una luz cualquiera, como tú… todos tenemos una luz que ilumina a través de
los ojos, las palabras, las sonrisas…
Nunca o siempre es el momento … para
apreciar las cosas y/o mejorarlas, enseñar al mundo lo que tienes dentro “TU LUZ” que es tan especial como la de
cualquiera.
Este rinconcito nace con la ilusión de que algunas de mis experiencias sirvan
para abrir puertas, ojos, o esperanzas…
aunque con sonrisas me conformaría.
Quiero que la gente se quiera y se cure, y valore su propia luz; y para ello ofrezco lo que soy, lo que se… y eso es lo que pretendo en este blog, y también en la terapia con mis pacientes y por supuesto con mis fotos.
Me llamo Irene, y esto es un trocito de mi....
Me licencié en Historia y me especialicé en
Arqueología, mi vocación desde que era muy pequeña; cuando quedaba fascinada
con los libros de mi abuelo y esas
puntas de flecha sobre terciopelo rojo que adornaban las paredes de aquella
inmensa casa.
Emprender para mí siempre fue casi una necesidad, y después
de muchas prácticas y diversos trabajos monté mi empresa con varios compañeros.
Hice mucho más que Arqueología, de hecho, me dedicaba más a la gestión y a la administración
(así conocí a mi “Mirlo Blanco” <3, el Papi de mis tesoros).
Tras varios años y un duro trabajo, aquel proyecto se
convirtió en un grupo de empresas. Era un bebé que había crecido demasiado
deprisa y que no supimos pilotar en tiempos de crisis.
12 años después, decía adiós a aquel camino que, aún ahora,
casi cuatro años después, es recurrente en mis peores pesadillas.
Con el peso de la impotencia
me encontré con un camino que
terminaba en abismo.
Aquello para lo que me había formado y por lo que tan duramente había trabajado, mi gran proyecto profesional, se había diluido como un azucarillo.
Aquello para lo que me había formado y por lo que tan duramente había trabajado, mi gran proyecto profesional, se había diluido como un azucarillo.
El hecho de ser autónoma (no tener derecho a paro ni nada
parecido) no me daba mucho margen.
Por
aquel entonces tenía a mi hija mayor con poco más de dos años y afortunadamente
el apoyo incondicional de mi marido y
toda mi maravillosa familia, aunque la verdad es que teníamos el agua al cuello.
Pero la vida te da oportunidades donde vemos golpes, y tenía que salir una parte que hasta entonces no había cultivado.
Se puede decir que en estos años estoy aprendiendo más de mí
que en el resto de mi vida.
Ahora sigo lo que me dicta mi instinto, disfruto estudiando
de manera incansable aquello que me dice mi voz interior.
En estos años leí y
estudié; también hice un millón (no creo
que llegue a esa cifra, pero casi…jejej) de cursos sobre , diseño
gráfico, photoshop, maternidad, crianza, lactancia, cosmética natural,
nutrición, macrobiótica, reciclaje, ahorro, manualidades, repostería creativa, decoración… y por supuesto de Fotografía, mi
gran pasión. Además he estudiado en la
escuela Neijing (filial de Tian) Terapia
Manual de Medicina tradicional China. Y tengo una lista inmensa de cosas por
hacer, estudiar.. conocer…
Y diréis, esta es un poco “maestro liendres” (en mi tierra
se dice “que de todo sabe y de nada entiende”).. y quizás sí, pero no puedo
evitarlo… aún así, en todo intento profundizar lo máximo posible, porque lo
vivo con pasión, no me guío por modas.
Lo que tengo claro, cristalino, es que todo lo que hago
quiero encaminarlo a que los demás se sientan bien. Porque he aprendido que
todas las personas tienen algo que ofrecer al mundo.
Quiero que la gente se quiera y se cure, y valore su propia luz; y para ello ofrezco lo que soy, lo que se… y eso es lo que pretendo en este blog, y también en la terapia con mis pacientes y por supuesto con mis fotos.
Si crees que puedo aportarte algo, quédate, también estoy segura de que aprenderé
infinito de vosotros.
Un abrazo inmenso, porque a estas alturas, ya me conoces
bastante!
Irene